Desenmascarar a los encapuchados
Alejandro Encinas Rodríguez
En apego al manual que las derechas han instrumentado en diferentes latitudes pretendiendo desestabilizar a los gobiernos progresistas y los procesos electorales de los que legítimamente han emergido, la derecha nacional alienta una campaña sucia sin escrúpulo alguno.
Cerca de cumplirse el primer tercio del proceso electoral, a la cruzada de desinformación y mentiras, se suma el vandalismo y la provocación que buscan imbuir una percepción de zozobra en el proceso. Lo mismo con la presencia de encapuchados, ostentándose falsamente como estudiantes de la Escuela Normal de Ayotzinapa en la Universidad Iberoamericana, para sabotear el encuentro de la candidata a Jefa de Gobierno, Clara Brugada, o patrocinando a grupos de vándalos, también encapuchados, que destruyen ostensiblemente la propaganda de la candidata puntera.
El primer debate entre la candidata y los candidatos en la Ciudad de México, da cuenta de esta estrategia, imbuida además de un tufo racista y discriminatorio. Por ejemplo, cuando el candidato panista señala que “en las utopías de Iztapalapa los niños toman clase de natación terrestre porque las albercas no tienen agua”, lo cual resulta ridículo; o cuando señala que la candidata adquirió un inmueble de mil 500 metros cuadrados en Iztapalapa por 339 pesos, exhibiendo el recibo del pago de un derecho a CORETT para la regulación del predio al igual que sucedió con todos los vecinos de San Miguel Teotongo, donde, por cierto, vive Clara Brugada, cuya casa tiene un valor catastral de 256 mil pesos, sobre un terreno de 160 metros cuadrados.
Taboada afirmó que la CDMX está inmersa en la inseguridad, exceptuando la alcaldía Benito Juárez y que la policía opera con malas condiciones laborales.
Datos del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal de la Ciudad de México, señalan que para octubre de 2023: “el homicidio doloso disminuyó 47%, la extorsión 40% y el feminicidio 20%., al mismo tiempo se registró una baja en la percepción de inseguridad gracias a la disminución de la incidencia delictiva.”
La alcaldía más segura en la ciudad es Milpa Alta. En Benito Juárez hay 315 delitos de alto impacto por cada 100 mil habitantes; en Milpa Alta hay 77 por cada 100 mil habitantes. El estado de la seguridad pública en la alcaldía Benito Juárez ha sido labor, además, del Gobierno de la CDMX, que dirige la policía capitalina mediante un mando único.
Sostuvo que un servidor de la nación gana más que un policía de la Ciudad de México. Falso. Un servidor de la nación gana 12, 417.36 pesos netos al mes, en tanto que un policía de la CDMX gana 16,365.81 pesos netos al mes. Su salario subió 68% a lo largo de este sexenio.
Es innumerable la lista de mentiras y noticias falsas, que dan cuenta de una estrategia que pretende desestabilizar el proceso. No es la primera vez que encapuchados o grupos de choque organizados por la derecha, incluso con respaldo desde el exterior, son utilizados para provocar desazón o incertidumbre. Lo vivimos con las acciones de grupos ligados a organizaciones clandestinas de ultraderecha, como “El yunque”, o en su momento con el MURO, por lo que es imperante insistir en que un principio fundamental en el desarrollo de toda democracia es además de respetar las reglas en la contienda, mantener una relación de respeto con los electores y desenmascarar a quienes detrás de una capucha o de una sarta de mentiras alientan la provocación. Ese es el principal reto que el INE debe superar. (@A_Encinas_R)
